1 17 mins 9 meses

El telón ha caído sobre el esperado Concurso Mágico por Amor 2023, celebrado con gran expectación en la pintoresca ciudad de Orizaba durante los días 29 y 30 de julio pasados. Entre deslumbrantes ilusiones y misteriosas hazañas, las luces brillaron intensamente en el escenario, pero detrás de la magia, también se asomaron sombras que despiertan interrogantes y críticas. En esta edición, exploraremos sin concesiones las luces y sombras que arrojó este evento.

La realización de este certamen es una luz por sí misma. No solo por el hecho de que sigan existiendo estos espacios para la medición del trabajo, sirviendo también como punto de encuentro y convivencia. Semanas atrás supimos del lamentable desceso de su director, el biólogo Gaddiel García Amador, quien no solo era un visionario comprometido con el arte, era un gran ser humano, abierto, amable y siempre dispuesto a brindar su mano a quien lo necesitara. Su ausencia significó un golpe durísimo, pero a su vez provocó el irreprimible deseo de continuar su legado, motivo por el que el concurso se realizó tal y como él lo planificó y lo hubiera deseado. Estoy seguro que no fue nada fácil, pero con un gran liderazgo las hermanas Corona Sánchez llevaron a buen puerto el evento.

En este contexto, la Rondalla Voces del Silencio de Yautepec y Cuautla brindó un homenaje al biólogo Gaddiel, con un sentido tema con el que participaron en la fase final y que es autoría del director de la rondalla. Además de resaltar que esta agrupación participó ambos días con temas inéditos, lo que aplaudo, se agradece que el concurso no nos quite la oportunidad de condolernos y expresar emociones.

Por su parte, el liderazgo musical, encargado de garantizar la correcta evaluación fue Guillermo Setién Castro, multipremiado director de la Rondalla Inspiración de Orizaba. En otra luz del evento, hay que resaltar la elección de jurados, conformado en su gran mayoría por músicos de renombre con credenciales suficientes en cuanto a conocimiento musical y logros rondalleros. Esto, al final, es factor determinante para una evaluación justa.

Celebramos que no notamos cambios de ritmo bruscos y sin sentido. No queremos decir que esto es gracias a nuestra insistencia, pero nos gusta pensar que en algo hemos podido ayudar a erradicar esto. Por supuesto, los cambios de ritmo no son malos, pero deben tener coherencia y apoyar el mensaje de la obra.

En general hubo un buen nivel musical, con 3 rondallas en la categoría Semillero Mágico por Amor, 7 en la categoría C, 8 en la B y otras 8 en la A. Esto es notable, sobre todo la categoría A que venía teniendo menos participantes.

Hablemos ahora de los protagonistas del evento: las rondallas. En categoría Semillero, la Rondalla Fantasía llegó con autoridad para ganar el primer lugar, poniendo la muestra, como muchas rondallas juarences, de que asistir a un concurso requiere preparación para aspirar a lo más alto y no solo participar por participar. Pero ojo, aunque este fue el resultado de la sumatoria general, en particular el día domingo, la Rondalla del Instituto Intercultural Ignacio de la Llave tuvo un mejor puntaje.

En categoría C la Rondalla Nota Cuántica vino de atrás para ganar, remontando sobre una Rondalla Azumar que no pudo repetir la gran participación del día sábado y que los tenía momentáneamente en el primer lugar. Aunque, hay que decirlo, ambas rondallas obtuvieron puntajes menores el día domingo, solo que el caso de Azumar fue extremo, quedando 59 puntos por debajo de su puntuación del primer día.

En esta misma categoría, me sorprendió gratamente la Rondalla San Juan, en particular con el segundo tema, muy bien ejecutado y haciendo uso de varios recursos técnicos instrumentales y vocales. Si siguen trabajando así, no duden que escucharemos mucho de ellos.

Quienes se quedaron lejos de lo que esperaba, fue la Rondalla Magia y Sentimiento. Ciertamente esta agrupación tiene que rearmarse una y otra vez, por la rotación de integrantes, pero en esta ocasión no lograron el impacto de otras veces. Como sea, tienen talento y buena dirección, sé que pronto recuperarán el rumbo.

La categoría B, a mi gusto, fue la que mejor competencia tuvo. El triunfo fue para Imperial de Córdoba, quienes fueron de menos a más y con un par de actuaciones muy consistentes lograron el triunfo. Los de Córdoba superaron en la final a la rondalla que iba en primer puesto, Amplic, quienes tuvieron una grandiosa primera interpretación de su tema Perfect, pero que en la segunda canción no pudieron mantenerse.

Una caída que me extrañó fue la de la Rondalla Versalles, quienes tuvieron una muy buena presentación. No obstante, no puedo decir que hubiera injusticia en los resultados, ya que como lo he mencionado antes, es diferente juzgar un trabajo completo y dividirlo en rubros y asignar puntos. Esto último es lo que hacen los jurados.

En categoría A se tuvo una participación más nutrida que en otros concursos, con un total de 8 rondallas. Sé que suena a que nos emocionamos con poco, pero luego de ocasiones de 3 o 4 rondallas, esta cantidad suena alentadora.

El triunfo fue para la Rondalla Matices de Tepoztlán con dos muy buenas actuaciones. El segundo lugar fue para Voces del Corazón, quienes brillaron con luz propia el día sábado, con una gran interpretación del tema El ciclo sin fin.

Aquí cabe mencionar que hubo varios casos de rondallas que presentaron temas que ya les conocíamos de un buen rato, lo cual no es malo precisamente, pero se agradece cuando las rondallas presentan nuevos trabajos o al menos unos no tan tocados.

También es justo mencionar a la Rondalla Fantasía, quienes tuvieron un buena actuación pero que desafortunadamente no estaba para categoría A. Sé que esta rondalla ha mostrado en otras ocasiones de lo que son capaces, a pesar de su corta edad, pero en esta ocasión venían con una formación completamente nueva y esto les pasó factura. Pero esperen, que si regresan en serio pondrán en aprietos a cualquier rondalla con la que se enfrenten.

En la categoría Especial solo llegó la Rondalla Fascinación de Puebla, quienes no tuvieron contrincante y tuvieron que presentarse sólo como exhibición. Por supuesto, esto no es culpa de la rondalla, quienes se prepararon con todo el compromiso y la responsabilidad que un concurso amerita. Por otra parte, la ausencia de rondallas en estas categorías en varios concursos recientes o la llegada de grupos que ya no tienen el punch de cuando ganaron la categoría A, debe hacernos reconsiderar la existencia de dichas clasificaciones. Yo veo un claro mensaje de que es imperante que desaparezcan las categorías Especiales o Doble A. Pero no solo eso, sino reiniciar y que las rondallas tengan que volver a ganar la A para tener derecho a una categoría Especial.

Musicalmente, la Rondalla Fascinación está en un muy buen momento. De hecho, como era de esperarse, prepararon un tema autoría de Francisco Gabilondo Soler «Cri-Cri», como lo solicitaba la convocatoria y lo hicieron de gran manera, logrando una versión emotiva y armónica. Aunque solo fuera de exhibición, la agrupación interpretó con mucha seriedad sus temas, lo que arrancó sendos aplausos del público. Incluso llegamos a verlos nerviosos, a pesar de que no estaban concursando. Esto me lleva a recomendar a las rondallas a que no abandonen la idea de dar conciertos, donde se permitan estar más relajados, interactuar más el público, disfrutar el momento y transmitir emociones.

La falta de exposición a otros públicos en otros ámbitos diferentes al concurso (conciertos, recitales, callejoneadas, etc.) tiene otros efectos negativos, y en este concurso lo notamos con varias rondallas. Un aspecto que revela la falta de control de escenario es cuando una rondalla, teniendo dos solistas y dos micrófonos, ambos o ambas deciden utilizar el mismo pedestal.

En general, el uso incorrecto de la microfonía delata la falta de experiencia, como no saber microfonear o definitivamente no usar los micrófonos, como el caso de Almas Románticas, donde una integrante hizo una especie de introducción treatralizada sin usar el equipo de audio. El público en la transmisión se perdió por completo esa parte del arreglo.

Ya hemos alargado esto demasiado y desafortunadamente tenemos que hablar de dos temas complicados. En primer lugar, nuevamente, como el año pasado, el audio quedó a deber, ya que continuamente había cambio de niveles de audio con lo que varias rondallas tuvieron que lidiar. Como ya lo habíamos dicho anteriormente, el audio es fundamental para un concurso de esta índole y si este elemento no se cuida se sacrifica lo más importante para apreciar el trabajo de las rondallas participantes.

De manera general hubo mucha fluidez en el desarrollo de todo el evento, pero una situación casi al final del concurso hizo que todo se descontrolara y que mucha gente se quedara con un mal sabor de boca. Primero relataremos los hechos. El día domingo, a las 14:45 horas ya habían participado todas las rondallas, con lo que solo faltaba conocer los resultados. De hecho, al terminar la categoría B se premió a las categorías Semillero y C, con lo que pudimos saber que la obtención de resultados estaba haciéndose muy rápida.

Pero entonces, vino el caos. Un representante del Ayuntamiento de Orizaba indicó que había sobrecupo de personas en el teatro y que de no tomar acciones se procedería a cancelar el evento. Esto pudo ocasionar que se apresurara la entrega de resultados y así terminar ya el evento y evitar mayores problemas. Pero había un elemento que lo complicaba: ya estaban presentes los encargados de los espectáculos previos al cierre, un saxofonista y un ballet folclórico. Sé que para la gran mayoría el tiempo que se tuvo que esperar fue exagerado, pero hay que ponernos en los zapatos de los organizadores. ¿Cómo le dices a un ballet de más de 12 personas que muchas gracias por participar pero que no podrían presentar su trabajo?

En respuesta, el comité organizador, considerando que todavía faltaban los espectáculos y la entrega de resultados, decidieron dar un descanso de hora y media, con la finalidad de que se despejara el teatro y que, al regresar, el representante del Ayuntamiento estableciera controles para evitar la aglomeración al interior del inmueble.

Mientras tanto, dentro, se comenzó con los espectáculos alrededor de las 16:20 horas. Si bien, la actuación del saxofonista fue ágil, no lo fue la del ballet que duró aproximadamente una hora. Esto retrasó en gran medida la entrega de resultados y final del evento, extendiéndose hasta poco antes de las 18:00 horas. Es decir, la actuación de las rondallas llevó alrededor de tres horas y media, y desde entonces se tuvo que esperar otras casi tres horas para conocer a los triunfadores.

Ahora, es cierto que la espera fue muy larga, pero si consideramos los problemas que estaban sucediendo con las autoridades, el comité organizador tuvo que decidir muy rápido y eligió la que consideraron mejor opción dadas las circunstancias.

Solo veo dos detalles importantes que cuidar. Lo primero es que, la información debe fluir de manera correcta, avisando a los asistentes y medios de comunicación de la situación exacta y lo que sucederá, para que se informe adecuadamente y se eviten los rumores e ideas equivocadas.

El segundo punto es que, en un concurso de rondallas en la época de inmediatez que vivimos, los espectáculos musicales y/o artísticos no generan genuino interés entre los asistentes y participantes, por lo que sugiero que se eviten y mejor se agilice la entrega de resultados para que todo mundo pueda disfrutar de la ciudad, comer con tranquilidad o emprender el camino de regreso a casa.

Algunas voces se han pronunciado respecto a que, anteriormente, los concursos de Puebla y Xalapa se extendían hasta altas horas de la noche, y que las largas esperas no deberían ser consideradas de forma tan negativa. Esto es cierto, en antaño los concursos podían iniciar a las 10am y terminar a las 10pm sin problema. Pero a diferencia de los concursos actuales, se percibía que había un buen motivo para esperar, porque esos concursos lograban reunir a más de 100 rondallas. Hoy, con menos de 30, se percibe que el tiempo de espera es mucho y más aún, si lo que falta sólo es la premiación.

Por otra parte, la situación de seguridad en las carreteras del país no es la más alentadora, viajar con luz de día es mucho más seguro para todos. Y más importante, creo yo, es que debemos dirigir los eventos rondalleros para que sean consumidos por el público en general. Creo que los participantes pueden esperar sin problema, sabiendo cómo suelen ser este tipo de certámenes. Incluso sus familiares pueden entenderlo. Pero la persona ajena a nuestro movimiento, que va solo a ver un espectáculo, difícilmente aguantará tanto tiempo y terminará por irse, logrando que nuestros concursos se mantengan en un círculo muy selecto.

Lo que no podemos aceptar es que, ante las inconformidades, estas se expresen con enojo, ira e incluso lleguen a las ofensas y faltas de educación. Ante todo, la amabilidad. Sé que como participantes del concurso o como público, pueden sentirse afectados, pero esto no justifica que se exprese la molestia de una forma agresiva.

En este mismo sentido, recibimos quejas que decían que el personal de apoyo del concurso contestó mal a algunas personas. Esto no nos consta, puesto que no lo vimos, por lo que no podemos negar ni confirmar que haya sucedido. Solo podemos resaltar lo mismo, que impere la amabilidad y que en la forma de pedir está la forma de dar.

En términos generales hubo una muy buena competencia, con una muy buena organización, que desafortunadamente se manchó con las situaciones fuera de control de la parte final y el mal trabajo detrás del equipo de audio. Lo que me deja tranquilo es que el comité organizador tomará esto con la mejor filosofía y aprenderá de los desatinos, para ofrecer una mejor edición el próximo año.

Hasta aquí este artículo, nos despedimos temporalmente, pero estaremos de regreso en esta columna después del próximo concurso de rondallas. Hasta entonces.

Una opinión sobre “Luces y sombras del Concurso Mágico por Amor 2023

  1. Total que los pobres organizadores del Mágico por Amor no más no logran salir bien en ninguna de sus ediciones, esta historia se repite cada año y lo que me encanta es que no se rinden, siguen en la lucha de lograr que el único concurso con causa prevalezca y siga brindando un espacio al que a Nadie se le obliga a asistir, pero luego se les van a la yugular como si los llevarán maniatados

    Hace mucho que Yo entendí que en los concursos no siempre gana el que más me gustó a mi, porque para gustos colores y es lo que se muestra en este tipo de espectáculos, que se trata de compartir la música que se hace en cada rincón del país, porque NINGUNA rondalla suena igual a la otra, porque los arreglos y los músicos son personas distintas y con distintos talentos y sentimientos, así que entre más pronto todos entendamos que los ganadores son elegidos por los jurados, que también son humanos y tienen sus gustos y preferencias musicales, más pronto vamos a disfrutar de los Concursos.

    Un tema aparte es lo que se vivió con respecto a el aforo del teatro, la lluvia, el audio y demás. Lo que si me queda claro es que en casi todos los concursos del país el día 2 del concurso siempre se ve abarrotado porque además de la participación final viene la premiación y Nadie se quiere perder la premiación, así que nadie se va del teatro y es lógico que cualquier recinto se vea abarrotado, tal vez la solución sería buscar un lugar más grande para el próximo año, pudiera ser la solución aunque no les aseguro que no se quejaran de otra cosa.

    En fin así las cosas y ni hablar. Gracias una vez más a todo el equipo por su trabajo y porque siempre les toca ser el sparring de los concursos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *